Cayma. «There is fire in their hearts» escuchó André Cook, quien tiene nacionalidad de Perú y de Estados Unidos, de Chris Dávila. Y nos tradujo: «Hay fuego en sus corazones».
Ellos dos, junto a Isaiah Edward, tienen la nacionalidad norteamericana, pero sus raíces son peruanas. Son apasionados del lacrosse, un deporte muy popular en Estados Unidos y que desde hace 8 años se practica en el Perú. En la actualidad solo Lima y Arequipa tienen deportistas dedicados a esta disciplina. Y ellos se preparan de cara al torneo mundial de lacrosse que será en Netanya, en el país de Israel, en junio de este año.
La sangre mistiana estará presente en la edición número 13 del mundial, que se desarrolla desde 1967, con 10 jugadores arequipeños de quienes en los próximos días se sabrá los nombres.
Lo más complicado del lacrosse es el equipamiento; pero para eso llegaron Chris, André e Isaiah. Ellos, en base a su experiencia internacional, dan la pauta a los jugadores locales. Existe cooperación y tienen expectativas de trascender al ver el ánimo de los deportistas en Arequipa.
El lacrosse está en proceso de formalización, aún no es reconocido por el Instituto Peruano del Deporte, pero existe un proyecto a largo plazo para llegar a ese estatus. En la Ciudad Blanca son ya dos clubes formalmente registrados, el más longevo es Lacrosse Arequipa.
