El capitán de la selección peruana de fútbol, Paolo Guerrero, jugó hoy los 90 minutos del empate 0-0 frente a Suecia para examinar su estado físico y rendimiento, lo cual dejó «conforme» al técnico de Perú, Ricardo Gareca.
El partido amistoso fue el segundo encuentro de Guerrero con la selección, tras la suspensión de la sanción impuesta por la FIFA el año pasado por dopaje, y marcó el decimoquinto encuentro invicto de la Blanquirroja.
Aunque Guerrero no pudo marcar en el estadio Ullevi de Gotemburgo, por la férrea defensa sueca, logró jugar en dupla con Jefferson Farfán, del Lokomotiv ruso, durante todo el partido para probar el ataque que Perú llevará al Mundial de Rusia 2018.
«Hacía tanto tiempo que no jugaban (juntos), era necesario verlos, era necesario que tuvieran minutos de juego», explicó Gareca en la rueda de prensa posterior al partido.
El entrenador argentino señaló que era importante que «Paolo terminara los 90 minutos y un poco sacar conclusiones».
«La idea fue esa y nosotros quedamos conforme. Por supuesto, hay que mejorar mucho, tenemos una semana y es mucho tiempo para eso, primero vamos a ver cómo se recuperan», explicó Gareca.
El estratega afirmó que Perú «no intentó guardarse nada». «Lamentablemente no pudimos hilvanar demasiada cantidad de jugadas», añadió.
La expectativa de la hinchada peruana se centró este sábado en la presencia de Guerrero, el máximo goleador del equipo, después de que la sanción de 14 meses por dopaje hizo peligrar la participación de uno de los artífices de la clasificación de la Blanquirroja al Mundial de Rusia.
F/EFE
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