El creativo Christian Cueva afirmó este martes que se va de Rusia con «el dolor de no haber convertido el penalti» que pudo haber cambiado la historia de Perú en el Mundial de Rusia.

Perú y Dinamarca igualaban sin goles en su estreno cuando un penalti cometido a Cueva lo desperdició el jugador del Sao Paulo. Luego vino el gol de Dinamarca y nada pudo hacer el conjunto de Ricardo Gareca para evitar la derrota por la mínima.

«Tuve la oportunidad de hacer un gol de penalti. Eso siempre se me va a quedar», lamentó el número ocho de la selección peruana tras el partido de despedida que ganaron por 0-2 a la selección de Australia en Sochi.

El talentoso jugador de 26 años tuvo protagonismo en el partido de hoy en la conducción de los contragolpes, e incluso fue suya la asistencia para que a los 50 minutos Paolo Guerrero anotara el segundo y definitivo tanto.

F/EFE