Se abre una nueva etapa para España. La pronta eliminación de la Copa del Mundo 2018 exige de medias urgentes para reconducir el rumbo de un equipo que llegaba a la cita de Rusia con bastantes expectativas.
Sin embargo, la destitución de Julen Lopetegui, a solo 48 horas del inicio del torneo, por su fichaje por el Real Madrid despertó un clima inesperado dentro del seno de la RFEF y terminó alterando el día a día a los jugadores, partidarios de su continuidad.
El fichaje exprés de Fernando Hierro para el banquillo, lejos de mantener el nivel de la fase de grupos, destapó carencias desconocidas dentro del actual bloque. España estuvo carente de verticalidad, falta de ideas en el último pase y mostró una gran fragilidad defensiva a lo largo de todo el torneo. La etapa de Hierro ha llegado a su fin antes de lo previsto y toca buscar un recambio al malagueño, que presumiblemente regresará a su antiguo cargo dentro de la RFEF.
Sin duda, su sucesor como seleccionador tendrá mucho trabajo por delante para conseguir que el equipo transmita de nuevo las buenas sensaciones que había dejado la ‘Roja’ en la fase de clasificación. Solo con una buena planificación, España recuperará la senda que le llevó, entre 2008 y 2012, a sumar dos títulos de la Eurocopa y uno mundialista en Sudáfrica.
Muchos candidatos para un solo puesto
El reto del nuevo seleccionador será llevar a España hasta la victoria final en 2020 y de antemano se perfila como una de las candidatas al trofeo continental en las apuestas con las mejores cuotas junto a otras históricas también en proceso de recomposición como Italia, que ni siquiera obtuvo plaza para Rusia, y Alemania, que se despidió en primera ronda.
Varios son los nombres que vienen sonando para la misión. Míchel, Luis Enrique, Quique Setién, Quique Sánchez Flores, Xavi Hernández y Roberto Martínez figuran en esa lista de futuribles y todos, a excepción de Sánchez Flores, entienden el fútbol de manera ofensiva. Por cercanía futbolística, Setién y Xavi, todavía sin experiencia real en el banquillo, serían las apuestas más claras para dar continuidad a un estilo y una filosofía de juego.
El problema radica en que el cántabro cuenta con contrato en vigor con el Real Betis y Xavi ya se ha comprometido para iniciarse como entrenador con el Al Saad de Qatar, en el que ha jugado sus últimos días de fútbol. Después de una larga trayectoria internacional con España, Xavi tendría la ventaja de conocer a la base del grupo y el h guardar una estrecha relación con los que serán los pesos pesados del vestuario, es decir, con Sergio Ramos, Sergio Busquets y David Silva.
Pese a los muchos errores por corregir, el talento está asegurado con la calidad que atesoran los jugadores que podrían asentarse en la absoluta en el futuro inmediato. La base de la Sub 21, subcampeona de Europa hace un año, tomará el revelo generacional porque futbolísticas como Ceballos, Rodri o Mayoral están capacitados para seguir los pasos de los precoces Asensio, Saúl y Kepa, campeones en Polonia y que viajaron con los mayores hasta Rusia.
