TodoDxT – Arequipa. El piloto arequipeño Sebastián Cavallero logró su objetivo en el Rally Dakar 2019, que se corrió íntegramente en suelo peruano. En su tercera participación en el evento internacional logró ubicarse en el puesto 41 de la clasificación general con un tiempo de 50h57m21s.
Eso no es todo, además fue el mejor peruano ubicado en motos, superando a Carlo Vellutino, César Pardo, entre otros. De esta manera logró meterse entre los 50 primeros del mundo, alcanzando su meta anhelada.
Todo DxT conversó en exclusiva con el hijo del Misti y nos contó toda su travesía.
Tras este Dakar, cumpliste tu objetivo propuesto…
Fui el único arequipeño participando, logré ser el mejor peruano en motos. Ha sido una buena carrera, ayudó que haya sido 100% Perú, las dunas me gustan mucho, y tan solo he tenido un problema en todo el trayecto. Me quedé sin frenos en el primer día y perdí alrededor de 20 minutos. De ahí todo bien, creo que ha podido ser mucho mejor si hubiera estado más entrenado, la lesión que tuve en el Dakar Series, en octubre, me paró un poco. Estuve dos meses y medio sin montar moto y me subí a la moto dos días antes del Dakar para asentarme un poco. Los últimos kilómetros de la etapa ya se sentía la falta de entrenamiento, pero ha sido un Dakar bastante bueno.
¿Sin esa lesión hubieses estado ubicado en mejores puestos?
No sé qué tanto, pero yo creo que sí, porque yo notaba que en algunos momentos ya para cuidar la moto y las caídas bajaba un poco de ritmo, con más físico hubiese podido ir al 100%.
¿Cuál fue la etapa más dura?
Como etapa completa no te podría decir cuál ha sido la más complicada, pero Arequipa – Moquegua en los últimos 50 km han sido los más difíciles, de ahí el regreso de Moquegua a Arequipa en las dunas de Ilo, nos hicieron una partida solo a motos y cuatrimotos que eran 15 km de las dunas más difíciles que hay ahí con waypoints escondidos en la parte más alta de las dunas para hacerlo más difícil. Ica también fue complicado, la parte de Tanaca me gustó, salimos en muy buen puesto de ahí (dentro de los 40). Marcona – Marcona fue dura porque hubo un cañón de 20 o 30 km de talco (polvo) que nos tocó con neblina, hemos estado yendo a 20 km por hora en el talco porque la moto se va a todo lado, de ahí fue muchas dunas al regreso de Arequipa a Lima. Partes de playa muy bonitas también hubo.
¿Eso es lo que te gustó, ver los paisajes también?
Sí, estuvo bueno. Hubo poco enlace este año, por eso hubo menos kilómetros de lo normal, ayuda mucho que no haya tanto enlace porque al final es lo que más te desgasta.
Cumpliste tu reto de estar entre los 50… ¿Cómo te has sentido en la parte física y en lo emocional?
Feliz por eso, creo que he podido andar un poco más, pero perfecto, creo que ha sido un puestazo para lo que ha sido peruanos a lo largo del Dakar. Creo que he estado cerca de los mejores puestos que ha conseguido el Perú y el próximo año veremos qué es lo que pasa, no te podría decir si voy o no, pero en abril ya tendremos noticias del Dakar.
¿Las últimas etapas se te fueron acomodando? Escalaste varios puestos…
El tercer o cuarto día ya agarro el mejor peruano, y de ahí solo mantuve el ritmo. No perdí el mejor peruano desde el día cuatro. Si bien las últimas etapas, por ahí Pardo me ganaba la etapa, no llegaba a pasarme en la general.
¿La diversión es parte del Dakar?
No la pasas bien en el Dakar, porque son etapas duras y estas sufriendo todo el día, pero cuando estás con gente y va más o menos a tu ritmo te empiezas a divertir en el desierto.
¿Cuánto influye el tema mental?
Creo que influye más que el tema físico, puedes estar más físicamente pero si mentalmente te derrumbas ya te abandonas más.
¿Es importante el apoyo de las empresas para este tipo de eventos?
Definitivamente. Desde el primero hasta el último corredor dependen de auspicios y felizmente este año ha sido bueno gracias al año pasado que también me fue bien. Creo que se han repetido y espero que el próximo año se sigan sumando las empresas.
Ahora, la valla es alta, ¿no?
Sí, hay que ver cómo será la ruta y ver cómo será el próximo año. Todavía es muy apresurado para tomar una decisión.