Cusco. El fútbol lo ha llevado a ponerse frente a frente con el club que lo catapultó a la profesional. Jesús el «Moncho» Arismendi vivió en Melgar los momentos más alegres y más tristes de su vida, eso resume todo lo que el actual lateral de Real Garcilaso siente por la rojinegra.
El sábado volverá a jugar en Arequipa nuevamente en el bando contrario, antes lo hizo con los colores de UTC, Vallejo, Boys y Ayacucho, y por ahí ser nuevamente el verdugo del Dominó.
«A Melgar le he anotado algunos goles, creo que tres con Ayacucho y uno con Real, con Boys no recuerdo que le haya convertido. Siempre he celebrado mis goles no por querer faltar el respeto al equipo al que tengo tanto cariño, sino porque así yo vivo al fútbol», señala.
Aunque el partido del sábado es por la devaluada Copa Bicentenario, para él ganar es un resultado que necesita su equipo para recuperar la confianza.
«El partido con Melgar es importante para nosotros, sobre todo en el aspecto anímico porque venimos de varios partidos sin ganar».
«Pienso que los equipos de la Liga 1 si han tomado con seriedad la Copa Bicentenario, pero los equipos de la Liga 2 no lo han hecho. A nosotros nos tocó jugar en Andahuaylas en una cancha mala que no es apta para el fútbol profesional», siguió.
Luego de su último paso por Melgar en el 2016, en Real Garcilaso ha vuelto a encontrarse con Juan Reynoso. «Todos conocemos como trabaja Juan, él ya tiene un estilo de juego definido que tratamos de aplicar. Luego de tres años nos volvemos a encontrar».
Como arequipeño es importante saber su opinión sobre la escasez de jugadores mistianos en Melgar. «Hay que dejar de lado eso de que solo en Melgar deben jugar arequipeños, yo tengo compañeros que no son de Arequipa y que están bien identificados con la camiseta. Olvidemos eso de arequipeños o limeños, acá todos están en un equipo y se dan íntegros. Uno está en el lugar que merece».
Replanteamos la pregunta. ¿Por qué no salen jugadores arequipeños al fútbol profesional? «Eso es verdad. Cuando he estado en Arequipa he visto algo de la Copa Perú y el fútbol arequipeño ha retrocedido, ya no se ve esos partidos de antes donde había más intensidad y futbolísticamente se veía otras cosas. Creo que hay desinterés de la gente que dirige el fútbol en Arequipa».
Su último paso por la rojinegra no le deja muy buenos recuerdos. «He jugado varias temporadas en Melgar, me fue bien, pero en el 2016 no tanto por una lesión. Así es el fútbol. Ahora en Real estoy tranquilo porque las cosas me van bien».
