Cercado. A los 63′ de juego, el estadio de la Unsa se paralizó por un momento. Ingresaba el jugador más esperado por los hinchas de Melgar durante las últimas semanas. Irven Ávila reemplazo a Hernán Hinostroza y empezó a asociarse bien con Joel Sánchez, Alexis Arias y sobretodo con su compañero de ataque, Bernardo Cuesta.
El «Cholito» tuvo un buen desempeño durante los 27′ que estuvo en cancha. Es más, casi anota tras un buen pase de ‘Berni’.
Tras el partido dijo lo siguiente: «Feliz de que la semana pasada ya había llegado mi carné (de cancha) y ahora contento, creo que estaba esperando estos minutos, tres meses que no hacía un partido oficial y estoy muy feliz. Agradecer a la directiva, al comando técnico y a mis compañeros por confiar en mí y retribuir toda esa confianza con mucho trabajo», dijo emocionado.
El delantero de Huánuco sabe que tiene que adaptarse a la ciudad.
«Por momentos me sentí ahogado y sin piernas», dijo.
Durante la casi media hora de juego, Ávila y Cuesta se entendieron a la perfección. Melgar ganó mucho más peso en ataque y Osella es el más satisfecho. El Dominó ahora tiene otra variante de juego, dos goleadores netos que irán por el Clausura.