Mario Cuéllar, defensor del club de fútbol boliviano de primera división Oriente Petrolero, sufrió una fractura del peroné en la pierna izquierda, tras trabarse en el césped cuando se enfrentaba este domingo al Guabirá, en el estadio Ramón Aguilera Costas, de la ciudad de Santa Cruz.
Los paramédicos acudieron a la atención de la emergencia y, tras constatar el mal estado del futbolista, lo subieron a una camilla, lo levantaron y quedaron a la espera de que la ambulancia entrara al recinto, pero el ingreso del auto no ocurrió.
Ante la tardanza de la ambulancia, el personal de atención médica primaria que socorrió al jugador lo llevó a los camerinos para después ir en busca de un vehículo de salud, ubicado al otro lado del estadio, pero no encontraron al chofer.
La emergencia obligó al personal a sacar al jugador del estadio. Detuvieron un taxi, al auto le reclinaron el asiento trasero y pudieron meter al futbolista, con la camilla, en el maletero del vehículo y así hicieron el traslado al hospital.
El parte médico determinó que el jugador sufrió fractura del peroné de la pierna izquierda y una luxación del tobillo. Fue sometido a una operación en la que le reconstruyeron los ligamentos y le colocaron una placa; por lo tanto deberá estar en reposo durante al menos seis meses.
¿Dónde estaba el chofer?
Hay varias versiones sobre el paradero del chofer de la ambulancia en el momento en que se presentó la emergencia.
Según el diario local Opinión, el conductor dejó su puesto de trabajo para ir a comer algo mientras se disputaba el encuentro. Otros medios han indicado que el hombre estaba en el baño.
El club Oriente Petrolero analiza abrir un proceso contra el chofer de la ambulancia y la empresa BAG Emergencias Médicas, que prestan sus servicios al equipo deportivo, por omisión de socorro.
