El suizo Gianni Infantino, presidente de la Fifa, consideró que la crisis global por el coronavirus puede suponer una oportunidad para «reformar» el fútbol «dando un paso atrás». ¿En qué piensa la cabeza de la organización que conduce el balompié mundial? Entre otras cosas, en un futuro con menos partidos y menos torneos, pero de nivel superior.
«Hace falta estudiar el impacto global de esta crisis. Ahora es difícil, no sabemos cuándo volveremos a la normalidad. Pero fijémonos en las oportunidades. Quizás podamos reformar el fútbol mundial dando un paso atrás. Con formatos distintos. Menos torneos, pero más interesantes», explicó Infantino en una entrevista publicada ayer por el diario italiano La Gazzetta dello Sport.
«Quizás menos equipos, pero más igualados. Menos partidos para proteger la salud de los jugadores, pero más igualados. No es ciencia ficción. Hay que calcular los daños, veremos cómo cubrirlos», agregó.
El presidente de la Fifa, quien en la víspera cumplió 50 años, destacó la importancia de privilegiar la salud en estos momentos de emergencia global por la difusión del coronavirus.
«Primero la salud y luego todo lo demás. Y lo demás, para los directivos, es esperar lo mejor y prepararse para lo peor. Sin pánico, hay que decirlo claro. Se jugará cuando se pueda sin poner en peligro la salud de nadie. Las Federaciones y las Ligas deben seguir las recomendaciones de los gobiernos», aseveró.
La emergencia alteró el normal desarrollo de las ligas y provocó, entre otras cosas, el aplazamiento de la Eurocopa y de la Copa América de este junio al próximo año. «Hemos demostrado espíritu de cooperación y solidaridad con Europa y Sudamérica. Ahora hay que pensar en el calendario de las selecciones y en las decisiones sobre la regulación del estatus de los jugadores y los fichajes.
Hay que pensar en proteger los contratos. Hacen falta medidas duras, pero no hay otra opción. Todos tendremos que hacer sacrificios», afirmó Infantino.
El presidente de la Fifa también se refirió a la reforma del Mundial de clubes, extendido a 24 equipos, y opinó que es una forma eficaz para aumentar el nivel del fútbol mundial. «El nuevo Mundial de clubes hace falta para desarrollar el fútbol. Lo quisieron todos los clubes, incluidos los ‘top’ europeos. Cuando la Uefa creó la Champions hace treinta años, hubo una insurrección de Federaciones y Ligas, tenían miedo de las novedades. Ahora dicen que fue algo genial. Pronto decidiremos si se jugará la primera edición en 2021, en 2022 o 2023», aseguró.